Te invitamos a reflexionar sobre cómo la equidad de género contribuye a construir una sociedad justa e inclusiva para todos y porqué es un tema que debe abordarse en el colegio.

Este blog explora cómo la equidad va más allá de la igualdad, abordando desigualdades históricas, desafiando estereotipos y promoviendo la participación activa de las mujeres en todos los ámbitos.

QUÉ ES LA EQUIDAD DE GÉNERO

La equidad de género es un concepto fundamental para abordar en la sociedad actual, que busca promover algo más que la igualdad de oportunidades y derechos entre hombres y mujeres. Se refiere a la idea de que todas las personas, sin importar su género, deben tener las mismas posibilidades de acceso a la educación, el empleo, la participación política y otros ámbitos de la vida.

Este concepto se acerca mucho a la descripción de Capacidad, presentada por Martha Nussbaum, en la cual el ser humano es libre en cuánto más libertades tiene para ser o hacer, acercándonos a lo más fundamental de la existencia humana.

En primer lugar, es importante entender que la equidad de género no es tratar a todos por igual, sino reconocer que existen desigualdades históricas y estructurales que deben ser abordadas para beneficiar el bienestar de todos los seres humanos. Esto significa que se deben implementar acciones en lo personal, familiar, social y políticas a nivel local y mundial,  que compensen estas desigualdades y que promuevan un trato justo y equitativo para todas las personas.

ASPECTOS CLAVES QUE DEBEMOS TENER EN CUENTA COMO DOCENTES EN EL PROCESO DE ESCOLARIZACIÓN

Un aspecto clave de la equidad de género es la eliminación de los estereotipos de género. Estos estereotipos son ideas preconcebidas sobre cómo deben ser los hombres y las mujeres, y limitan las oportunidades y posibilidades de desarrollo de las personas.

Promover la equidad de género implica desafiar estos estereotipos y fomentar la igualdad de oportunidades para todos, independientemente de su género. Actualmente buscamos promover que en los salones de clase se eviten diálogos prejuiciosos que hablen de roles específicos, es decir no sesgar las posibilidades que tienen los niños y las niñas de desarrollarse en las áreas que deseen.

Un ejemplo de ellos son las matemáticas, históricamente se ha asociado en las aulas de clases tradicionales, que las matemáticas son temas de niños. Y esto pre-condiciona las mentes y las acciones de los estudiantes. Así mismo, estos roles han alejado a los niños de actividades que se han asumido como roles específicos de las mujeres.

Otro aspecto importante de la equidad de género es la promoción de la participación y el liderazgo de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad. Históricamente, las mujeres han estado alejadas en roles de liderazgo y toma de decisiones, tanto en el ámbito político como en el empresarial.

La equidad de género busca cambiar esta realidad, promoviendo la participación activa de las niñas, niños, mujeres y hombres en todos los niveles y garantizando que sus voces sean escuchadas y consideradas.

Además, la equidad de género implica garantizar el acceso a servicios básicos y derechos fundamentales para todos, sin importar su género. Esto incluye el acceso a la educación, la atención médica, la vivienda y la protección legal. Este es un punto importante como sociedad, que visibiliza las desigualdades entre las personas de distintas culturas y países.

Por ello, temas como los objetivos de desarrollo sostenible, que abordamos en otro de nuestros artículos, toma relevancia, OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE,  ya que requerimos comprometernos y sincronizarnos desde la escuela y el colegio con la sustentabilidad de nuestra especie.

La equidad de género reconoce que cada persona tiene necesidades y experiencias diferentes, y busca abordar estas diferencias de manera justa y equitativa, para lograr lo que se denomina el BIEN – ESTAR.

En resumen, la equidad de género es un concepto central en la sociedad actual, que busca promover la igualdad de oportunidades y derechos entre hombres y mujeres.

En el colegio, implica desafiar los estereotipos de género, promover la participación de todos los estudiantes en roles de liderazgo y garantizar el acceso a servicios básicos y derechos fundamentales para todos.

Al promover la equidad de género, se trabaja hacia una sociedad más justa e inclusiva para todos sus miembros. De esta manera, en las instituciones educativas debemos estar más atentos a revisar nuestro lenguaje y comportamiento, deteniéndonos a reflexionar sobre nuestra percepción de lo que significa ser humano, de nuestras posibilidades y sobre como potenciamos y acompañamos a los estudiantes.

Significa esto un repensar los objetivos de la educación. Ya que no se trata de memorizar contenidos , se trata de un espacio donde compartimos, empatizamos, estructuramos nuestra forma de ver el mundo y donde somos capaces de sentir con el otro, algo más de compasión sobre la experiencia humana.

Para concluir, la equidad de género no es solo un ideal, sino una necesidad imperante en nuestra sociedad. Al desafiar estereotipos, promover la participación activa de las mujeres y garantizar igualdad de acceso, construimos cimientos sólidos para una sociedad justa e inclusiva.

Recordemos que la equidad de género no solo beneficia a las mujeres, sino que enriquece a toda la sociedad.

En Saberes, como parte de nuestro compromiso con los ODS (Objetivos de desarrollo sostenible), trabajamos por equilibrar las condiciones y oportunidades laborales de quienes trabajamos allí, así mismo ofrecer un trato sin discriminación alguna con nuestros clientes y beneficiarios.

¡Es hora de trabajar juntos para forjar un futuro donde todos, independientemente de su género, prosperen y contribuyan plenamente al progreso colectivo!